Terminamos los artículos del enfoque del lenguaje hablando de la psicología cognitiva.
Psicología Cognitiva
El término cognitivo deriva del término latino que implica el pensamiento. Se refiere a la manera en que los seres humanos elaboran juicios y toman decisiones y cómo las personas interpretan, o malinterpretan, el comportamiento de otras. Este enfoque supuso una nueva forma de analizar la manera en que los hombres usan la mente para resolver problemas, crearlos o empeorarlos.
Nuestro modo de pensar determina en gran medida si alcanzamos nuestros objetivos y disfrutamos de la vida o por el contrario nos sentimos frustrados y sufrimos por no conseguir lo que deseamos. Si nuestro pensamiento es sencillo y claro, estaremos mejor equipados para alcanzar esas metas, pero si, por el contrario, nos quedamos empantanados por significados simbólicos distorsionados, razonamientos ilógicos e interpretaciones erróneas, nos volvemos ciegos y sordos y hacemos sufrir a los demás y a nosotros mismos.
Según el contexto y otras observaciones de nuestro entorno, entretejemos toda una serie de significados a nuestro comportamiento y el de los demás para llegar a determinadas conclusiones. Nos damos razones, nos imponemos mandatos y deberes, atribuimos causalidad a los actos de los demás… buscamos explicaciones inmediatas.
Nos sentimos más seguros cuando las encontramos, cuando creemos conocer los móviles y los sentimientos de las otras personas respecto a nosotros, pero confiamos en las conclusiones a las que podemos llegar más de lo que los hechos justifican. De esta forma, podemos leer incorrectamente rechazo en el otro cuando se produce una distracción, podemos suponer por error que hay enfado cuando en realidad hay ansiedad, o podemos atribuir malas intenciones al comportamiento de los demás.
Ante el silencio, por ejemplo, de un compañero de trabajo, el flujo progresivo de pensamientos negativos puede desembocar en algo como:
- ¿Por qué está callado?
- Debe de estar enojado conmigo
- Habré hecho algo para ofenderlo
- Siempre está enfadado conmigo
- Siempre enfado a la gente
- Nunca consigo que me acepten
- Me despedirán
Por lo tanto, el trabajo de la terapia cognitiva se centra en detectar esas interpretaciones erróneas y distorsiones con el fin de corregirlas para mejorar la capacidad de ver y oír de una forma más realista. Cuando las personas identifican sus pensamientos automáticos y convicciones, con el fin de determinar si son o no erróneas y establecer acciones correctivas, el sistema mental tiende a inclinarse hacia una posición neutra de forma que esos prejuicios negativos y deformaciones de interpretación pueden desaparecer de forma más o menos gradual.